La Quebrada de Humahuaca fue declarada el 2 de julio del año 2003 Patrimonio Cultural y Natural de la Humanidad por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
El organismo cultural resolvió designar a la Quebrada de Humahuaca Patrimonio Mundial durante una reunión celebrada en París hace 18 años.
Con esta declaración se dio un paso trascendental para la puesta en valor del potencial turístico y cultural que tiene Jujuy, para así compartirlo con miles de turistas de todo el mundo.
La Quebrada de Humahuaca, encerrada entre altas montañas, tiene alrededor de 200 kilómetros de longitud, pero apenas 13 kilómetros de ancho, y es regada por un río caudaloso en tiempos de deshielo.
Entre sus atracciones figura el Pucará de Tilcara, una fortificación que los aborígenes construyeron en la cima de una montaña desde donde se domina el valle y los caminos de acceso.
La Quebrada de Humahuaca, con sus poblaciones tradicionales, sus comunidades aborígenes y sus montañas de colores, ha sido un destino tradicional de los turistas argentinos y del exterior.