El Día Internacional contra el Dengue se conmemora hoy con el objetivo de crear una mayor conciencia para la prevención y tratamiento de una enfermedad verdaderamente contagiosa, que está entre las diez principales amenazas a la salud pública mundial.
El dengue se transmite a través del mosquito Aedes aegypti y -en menor medida- del mosquito Aedes albopicus. Ambos vectores provocaron que sea endémico en más de 100 países, con una mayor prevalencia en los sectores más vulnerables, y, de acuerdo con las estadísticas de la Organización de la Salud (OMS), unas 500 millones de personas de América del Sur, Central y del Norte están potencialmente en riesgo de contraer la enfermedad.
Entre los principales síntomas se destacan: fiebre, náuseas o vómitos, erupción en la piel, dolor de cabeza y dolor detrás de los ojos y dolores musculares varios.
Ante la aparición de cualquiera de estos síntomas, se recomienda la consulta inmediata con el centro asistencial más cercano.
Como medida de prevención, se recomienda eliminar todos los reservorios de agua donde se crían las larvas, sanear predios y remediar suelos, incorporar mejoras que hacen a la salud ambiental y a condiciones de vida saludables, como provisión de agua corriente, cloacas, y gestión de residuos, entre otras.
Además se puede proteger al instalar mosquiteros en buen estado, evitando las picaduras de los mosquitos con abundante repelente y usando ropa que cubra brazos y piernas.
En la actualidad, la vacuna se encuentra en etapa avanzada de aprobación por parte de la autoridad sanitaria de la Unión Europea (EMA) y las de muchos países con dengue endémico, entre ellos Argentina y Colombia; la solicitud de aprobación en Estados Unidos está proyectada para fines de este año.