Según dijeron en el entorno de Bullrich, el faltazo a la mesa de dialogo, fue un mensaje a toda la primera plana del PRO pero principalmente al ex presidente. A la titular del PRO la enfureció una declaración de Macri de la semana pasada, cuando presentó su libro en Mendoza.
"Voy a ayudar a contener egos, que entienda todo el mundo que no hay que adelantar el 2023 al 2021", dijo Macri ante un auditorio de emprendedores.
"Fue una grasada", dijeron que la ex ministra lo tomó como una alusión personal. "Ya estoy grande para pelearme por egos", dijo Patricia en los últimos días. "Ella no hace shows, se enoja y preparate", advierten en su entorno.
En algunos sectores del gobierno porteño aseguran que no es imposible una boleta con Vidal en el primer lugar y Bullrich en el tercero. Pero en el entorno de Bullrich aseguran que eso "no tiene sentido". "Se están equivocando feo", repiten y estiman que el enfrentamiento en las primarias asoma inevitable.
Hasta al momento Bullrich se había mostrado alineada a las decisiones de Macri, que le pidió a Vidal que compita en la provincia para allanarle el camino en la Ciudad a su ex ministra y le había dicho que se preparara para la "guerra" tras no poder convencer a Larreta de que acepte esa postulación.
Sin embargo, en el espacio de Bullrich dicen que ella no es empleada de Macri y que no oculta sus intenciones de ser candidata a presidenta.