En Ushuaia le harán multas de hasta 18 mil pesos a quienes arrojen colillas de cigarrillo en la vía pública. La decisión fue tomada por el Concejo Deliberante de la capital, tras aprobar el proyecto del grupo “A limpiar Ushuaia”, quienes definieron a las colillas de cigarrillos como “residuos sólidos urbanos sujetos a manejo especial”, y determinaron la instalación de tres “colilleros” por cuadra.
La iniciativa fue propuesta por la agrupación social “A limpiar Ushuaia” y fue aprobada por unanimidad. Según lo acordado, se prevé un régimen de sanciones de entre “100 y 250 unidades fiscales”, que equivalen a un máximo de 18.250 pesos, además de “10 horas de trabajo comunitario y asistencias a capacitaciones sobre preservación de medio ambiente”.
El acuerdo también establece que los fondos recaudados serán destinados a programas de educación y saneamiento ambiental de la ciudad. El movimiento de concientización ambielntal ya había impulsado una ordenanza anterior, que prohíbe la distribución de cubiertos descartables en locales gastronómicos y la comercialización de hisopos de plástico.
Esta nueva ordenanza, afirma que las colillas de cigarrillos son “Residuos sólidos urbanos sujetos a manejo especial”, y abre paso a un “plan de gestión ambiental diferenciado del resto de los residuos”, según afirmaron voceros oficiales del Concejo Deliberante.
Además, la normativa decreta la instalación de “colilleros”, 'tachos' donde se puedan arrojar las colillas, con un mínimo de “tres por cuadra” y cuya colocación y mantenimiento se coordine “entre comerciantes y responsables de edificios públicos y privados”, indicaron en el comunicado oficial.
Según el informe del grupo social “A limpiar Ushuaia”, una sola colilla de cigarrillo puede contaminar entre 50 y 1000 litros de agua dulce, y entre 8 y 10 litros de agua marina. Además, su tiempo de degradación va desde los 8 a 12 años, y a nivel mundial se liberan al medioambiente unos 4,5 billones de colillas por año
